Wat Xieng Thong |
Macarena frente al Arbol de la Vida |
En otro recinto descansaba un enorme carro mortuorio, cuya parte delantera estaba tallada con el rostro de serpientes con sus colmillos al aire. Al lado de esta estructura había gran cantidad de figuras de Buda en posición erecta y con las manos en los costados. La decoración exterior de la capilla funeraria estaba compuesta por imágenes en relieve del Ramayana.
De regreso al centro de Luang Prabang nos encontramos con un café francés llamado Le Banneton, donde disfrutamos de unos deliciosos baguettes con mantequilla y café.
Continuamos por calle Sisavangvong. En el camino me fui tomando fotografías de las bellas construcciones hasta que llegamos a las faldas del monte Phu Sí. Subimos caminando hasta la cima, donde había una hermosa vista de la Luang Prabang, el río Nam Khan y las montañas boscosas.
Cuando comenzamos el descenso nos encontramos con varias figuras dispuestas en medio de una abundante vegetación. El vuelo de mariposas de colores y las hojas que caían de los aires le daban un aspecto onírico a la situación. Así llegamos hasta la huella de Buda, un enorme pie plasmado en la piedra.
Llegando al plan de la ciudad llegamos a una escuela budista. Desde las puertas y ventanas se divisaba a los monjes sentados en los pupitres. Atravesamos la escuela y por un estrecho callejón regresamos a calle Sisavangvong, donde flameaban las banderas de Laos y el Partido Comunista.
Hernán Castro Dávila
Febrero 2014
Luang Prabang, Laos
Crónica en Apuntes y Viajes: La ciudad de ensueño (segunda parte): Wat Xieng Thong, café Le Banneton y el monte Phu Sí