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Este libro lo que encontré rebajado en la Feria del Libro de Viña del Mar. Apenas lo vi, pensé que era justo lo que necesitaba para ampliar mis conocimientos cinéfilos: Columnas de crítica cinematográfica, ordenadas cronológicamente y escritas por un chileno.
Y así fue. Héctor Soto ha sido generoso en comentar cuanta película se le pasa por delante, manteniendo una distancia crítica, pero al mismo tiempo defendiendo el lugar del espectador y el público en general.
Luego de leer el libro descubrí que aún me queda mucho cine por ver. Particularmente los clásicos.
Extractos
"Para un tipo de provincia, sin grandes contactos, en un país tremendamente cerrado y ensimismado como era el Chile de entonces, la apertura de horizontes asociada al cine, más que importante, era sagrada."
"No deja de ser revelador que en los momentos en que el personaje se siente acorralado sólo atine, por una reacción casi animal, a bailar, esto es, a expresar con el cuerpo lo que no puede traducir en palabras."
"En los ochenta las vanguardias encontraron su merecido: fueron a parar a la retaguardia; esto es, a los museos, a las casas de la cultura y a las universidades, espléndidos sarcófagos del arte, el pensamiento y la cultura."