Es un día cualquiera de abril, el sol se alza en el cielo y en Valparaíso circulamos con camisas de manga corta. Por la radio anuncian alerta roja para la zona. Hoy se cumple un año del incendio que consumió buena parte de la ciudad y ni los bomberos, ni las autoridades, ni nadie en su sano juicio quiere que un desastre así se repita de nuevo.
Por los diarios las autoridades se acusan mutuamente: alcalde, intendente y gobernador se dicen unos a otros que no han hecho lo suficiente, mientras la basura se sigue acumulando en los cerros y los ciudadanos lo seguimos observando impertérritos. Hace sólo unos días un incendio forestal de proporciones asoló la parte alta de la ciudad. Por suerte no se quemaron casas, pero el desastre natural sí fue de proporciones.
Los árboles, un poco más alineados con la estación, dejan teñir sus hojas de amarillo y las sueltan sobre las calles de la ciudad.
Los días en la oficina van pasando cada vez más rápido. Solo el tono amarillo de los árboles y el calor de los días me distraen de vez en cuando. El café y la conversación esporádica con los colegas me desespereza entre planificaciones publicitarias, presupuestos y estadísticas de apariciones en los medios de comunicación.
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| Caminando por Playa Ancha #Valparaíso #Chile 🚶 |
De lunes a viernes mi conexión con la ciudad se reduce al traslado entre mi casa, el trabajo (Del cerro Los Placeres a Playa Ancha), el centro donde practico yoga y el gimnasio. A veces, después de almorzar en la pega, aprovecho de caminar por avenida Altamirano disfrutando de la vista al Océano Pacífico, Playa Las Torpederas y la Piedra Feliz.
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| Cerro Barón #Valparaíso #Chile 🚶🌅 |
Una vez a la semana tomo una micro desde Playa Ancha hasta el cerro Larraín, donde realizo un taller de periodismo en el Colegio Leonardo Murialdo. A veces, al salir del taller, bajo caminando, tomo el ascensor Barón, cruzo avenida Argentina y llego hasta la estación Barón, donde abordo el tren que me lleva hasta Viña del Mar. Desde la estación Miramar enfilo por el borde costero hasta 8 Norte, donde voy al gimnasio.
Otras veces, cuando no voy al gym, bajo caminando por Larraín, bordeo el cerro Barón disfrutando la vista al océano y luego subo por el cerro Placeres, deteniéndome para comprar flores y finalmente llegar al hogar. Estas rutas a pie son ricas en atardeceres y paisajes para retratar y subir a Instagram.
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| Anochece en #ViñadelMar #Chile 🚶🌃 |
En los vaivenes urbanos, los días de abril se parecen más a los días de febrero, el calor me obliga a guardar la chaqueta en la mochila, el humo de los incendios me preocupa y los árboles me recuerdan que, a pesar de todo, estamos en otoño y el mundo sigue girando.
Hernán Castro Dávila
Valparaíso, Chile
12 de abril del 2015
